23 de agosto de 2008

Reseña: Los Exiliados #13

Tu tienda de cómics en Ciudad Real

Título en España: Los Exiliados #13: Hijo de Apocalipsis
Título en EEUU: Exiles #58 & Exiles #59 & Exiles #60 & Exiles #61
Formato: Comic Book 96 páginas
Precio: 7.75 €
Editorial: Panini Cómics

Reseña:

Continuamos recortando números a la serie americana "Exiles" con la que, aún, hay una gran diferencia temporal. Y también descontamos tomos para que pasemos, de una vez por todas, el número especial con el cruce con Dinastía de M que fue publicado cuando tocaba dando un salto que hasta ahora no hemos logrado cubrir. Con Tony Bedard introduciendo una serie de cambios que se van notando paulatinamente dentro del grupo de los Exiliados, unos cambios que, por otra parte creo que le están sentando bastante bien a la franquicia. Alguno de ellos se asienta y se confirma en este tomo, como la relación entre Destello y Mímico, el regreso de un antiguo compañero de armas o la transformación de Sasquatch al final del anterior número.

Porque, en el tomo número 12 (el anterior a éste), Heather sufría la transformación de Sasquatch a Tanaraq, siendo la criatura mágica canadiense la que retara a sus compañeros Exiliados a llevar una línea de acción más directa en el cumplimiento de sus misiones. Quizá sea un razonamiento y un giro argumental poco sorprendente porque estamos cansados de verlo, ejemplos de ello son Magik o Namora, que han entrado en el grupo con mucha fuerza pero que pronto vieron atenuada su violencia por el comportamiento general de sus compañeros. Sin embargo, en esta vez será diferente, pues Tanaraq planta una semilla en la mente de los héroes, la posibilidad de llegar hasta el Agente Temporal y enfrentarse a él, o la de intentar acceder al Multiverso utilizando este acceso a su favor. Si a todo ello le incluimos la aparición de un buen grupo de supervillanos unida a una batalla contra la criatura Tanaraq, nos queda el primer mini-arco argumental de los tres que consta este tomo.

A partir de la siguiente misión, los Exiliados viajarán a una realidad que ya visitaron hace tiempo en anteriores etapas, en la que se reencontrarán con un antiguo aliado por el que parece no haber pasado el tiempo y que dará pie a un nuevo cambio de aires dentro del grupo. Como ya he dicho, Tony Bedard no sólo está creando pequeños cambios entre las relaciones del equipo, sino que lo hace de una forma coherente (que no quiere decir predecible), sirviéndose, siempre, de su gran conocimiento de la serie. Todo esto, es lo mínimo que se le puede pedir a un autor como él. Otro gallo nos cantaría si rompiera de vez en cuando su esquema tipo y ofreciera más interactuación entre los Exiliados y cada nuevo entorno en el que aparecen, y no sólo con la gente que allí vive.

La segunda mitad del tomo es la que da, en realidad, nombre a éste. "Hijo de Apocalipsis" trae consigo una visita a la Era de Apocalipsis, la realidad de la que salió Destello antes de formar parte de los Exiliados. Volveremos a ver a Holocausto, Magneto, Gambito y demás personajes de tan añorada etapa mutante, no sólo por los lectores sino también por la editorial, que ya la trajo de vuelta en una breve historia que aquí se sacó en un mismo volumen o ha procurado meter a algunos de los personajes en el Universo Marvel original, como la Bestia Oscura (la cual ha pasado por colecciones como la Excalibur en Genosha de Claremont o X-Men: Especie en Peligro). Aquí seremos testigos de un enésimo cambio en la formación, con un Agente Temporal cada vez más confuso que dará pie a la toma de decisiones por parte de Destello, Mímico y compañía que harán cambiar el rumbo de la serie (y lo digo sabiendo lo que digo, algo se puede adivinar de lo que nos depara el futuro si os leísteis en su día el ya comentado cruce con Dinastía de M).

Los dibujantes siguen siendo los mismos. En la primera mitad del tomo persiste el estilo animanga de Mizuki Sakakibara, al que me he llegado a acostumbrar de tal manera que relaciono inmediatamente sus dibujos con la serie. Eso no quiere decir que haga buen trabajo, pues más me parece que tiene rachas de luces y sombras en la colección, siendo, los dos primeros números USA del tomo una de las sombras. Por contra, tenemos a un inspiradísimo Jim Calafiore que firma dos números muy buenos en los que se ve en la tesitura de traer de vuelta una etapa tan controvertida como la Era de Apocalipsis. Más me hubiera gustado que se contara con algún artista puntero para dibujar este cruce, o alguno de lo dibujantes de las colecciones principales mutantes en la época, aunque entiendo perfectamente que Los Exiliados no es una colección precisamente importante dentro de Marvel.

En definitiva, un número que, en cuanto a nivel técnico, de guión, dibujo, etcétera, sigue una línea constante con lo que hemos leído hasta ahora. Aunque se introducen nuevas variables que han cambiado la tónica habitual de la serie que pueden aumentar el interés del contenido en futuros tomos.

6/10

Reseñas relacionadas:
Los Exiliados #12
Los Exiliados #11
Los Exiliados #10
Omega Flight: Alpha y Omega
X-Men: La Canción de Guerra de Fénix

No hay comentarios:

Related Posts with Thumbnails