Chicharritos.info, ¡la machada!

Ayer, día 12 de diciembre de 2007 se jugó la segunda jornada de la primera fase de liguilla del Trofeo Rector 07/08. En la primera le tocó jornada de descanos a los Chicharritos.info, pero para la segunda jornada estabamos reclamados a jugar contra unos hombrecillos de peto verde llamados los "No hay comunicacióN".

Todo comencó una buena mañana cuando, reunidos los Chicharritos.info nos peparábamos para asaltar el liderato del grupo. Caras de concentración y un rondito para activar las piernas. Pronto echamos en falta que había tres individuos que faltaban, ¡pero no nos hicieron falta! Nosotros, grandes deportistas, con un físico que más lo quisiera más de un Cassano, estábamos dispuestos a aguantar un partido entero con sólo 2 cambios. El encargado de dar la alineación así como colocar a todos los hombrecillos en el campo fue el que más tarde sería proclamado por la afición, así como por todos los allí presentes como MVP de la competición hasta el próximo partido: Paco Baresi. Así pues, el equipo titular fue:

1. Sergio PaNtera Morales (portero)
4. Miguelón (defensa derecho)
7. Alberto Jezú (defensa izquierdo)
9. Paco Baresi (todocampista y estrella indiscutible)
14. Alberto Judas (extremo derecho)
69. O Rei Serginho (extremo izquierdo)
8. Ismael Agüero (delantero centro)

No quisimos darles ventaja, así que salimos todos, dejando en el banquillo a nuestras dos armas secretas, José Carlos Butragueño (11), que es el malulo de Toledo, y a Emiliaco Salinas (5) que es nuestro capitán, y como no queremos que se lesione y no venga la Emilia y nos pegue, procuramos resguardarlo de la lluvia, de los virus y de todas esas cosas malas que están en el ambiente.

Hay que reconocer, que sólo el Sabio de Valdepeñas, un hombre que, cuando era pequeño y tenía 3 años se leyó en una tarde el Silmarillion y luego lo escenificó por la noche para en un teatro repleto de gente, apostaba por una victoria del equipo rojo. La Furia Roja acompañó al equipo como en casi todos sus desplazamientos, aunque una vez más, la presidenta del club de peñas nos falseó y no se llevó a 9 tías buenas para que les firmáramos o firmásemos unos autógrafos en el culo, nuestro mayor sueño desde que somos grandes estrellas del fútbol provincial mundial. También contamos con un palco de lujo que completaban Maján-Navas (la perla del Guadiana), Taffffa (que le gusta mucho el marisco) y Pascal Man (que te escribe el código de la solución de un sudoku en el papel higiénico mientras caga en el cuarto de baño). Amén de dos personalidades que no confirmaron su presencia hasta horas antes del partido, Delegator, un hombre corrupto sin duda pero por necesidades del cargo pues es, en realidad, una buena persona; y nuestro Presidente de Honor, Van Manuel, que antaño fuera nuestro hombre-gol y pichichi.Sin embargo, yo empecé a volverme creyente como él al comprobar cómo Paco Baresi, en un alarde de casta, de técnica y habilidad supina se plantó en las proximidades del área y, engañando al defensa, batió al portero sin esfuerzo denotando que él es el verdadero crack del equipo y el amo dentro del campo. Yo no dudé en celebrarlo, porque si algo llevo conmigo (a parte de una cinta para hacerme una coleta pues los que tenemos melena "heavylona" necesitamos de esos artilugios para poder jugar al fútbol) es el sentimiento chicharrito. Pero más felices cuando se confirmó nuestra superiodidad sobre el terreno de juego: Paco Baresi, emulando al siempre bien recordado Fernando Hierro lanzaba una falta directa que el portero no vio y que supuso el 2-0 en el marcador. Una ventaja que, más tarde, echaríamos por tierra por algunos fallos puntuales (¡pero no nuestros!).

Hubo tiempo para que la afición vitoreara al equipo una vez más, después de que acortaran distancias con el 2-1 en un contragolpe que no supimos parar de una forma adecuada, nuestros delanteros decidieron que era divertido meterse en un barullo y lanzarse, como si de leones se tratase, a por el portero, el balón y a por quien hiciera falta. Eso mismo pitó el árbitro, falta. En concreto, penalty. Lo que no sabían los hombrecillos verdes es que Paco Baresi no sólo es balón de oro y jugador del año de Europa, sino que también había ensayado el lanzamiento desde el punto fatuo. Evidentemente, el gol subiría al marcador y nos marcharíamos al descanso con una clara ventaja en el marcador 3-1.

Fue en ese preciso instante cuando yo, que había estado jugando toda la primera parte y había contemplado el carrusel de cambios y rotaciones de mis compañeros, decidí empezar en el banquillo para que el potencial ofensivo de nuestro equipo fuera mayor aún. Pues si algo me caracteriza es que soy un defensa puro. Y duro. Si hay que darle un pisotón, patada o empujón al jugador del equipo rival, se le da, porque esto es fútbol. Si fuéramos todos unas mariconas que nos diera miedo pegarnos patadas, jugaríamos al baloncesto. Lástima que no pudiera resarcirme en cierta ocasión en la que un hombrecillo que corría más que Gacela Thomson se me intentó regatear y yo le pisé un poco el tobillo haciendo honor a Bilardo ("Písalo, písalo").

Mirad al 4, qué estilazo. Y mirad al 7, qué pantalones más largos.

Desde el banquillo pudimos ver que el árbitro era más malo que Iturralde. Un fuera de juego que no era fue pitado en nuestra contra y una rigurosa falta que supuso un libre indirecto nos hicieron perder los tres puntos. Cierto es que Paco era el pichichi histórico del equipo con su hat-trick, y que el cuarto gol lo marcó Ismael Agüero (el cual, en esta ocasión, decidió no golpear el balón con la mano, en un alarde de honestidad) en una preciosa jugada individual. El empate a 4 fue injusto y nos merecimos ganar. Aunque me queda un regusto dulce, porque eliminamos a ese equipo tan guarro y protestón contra el que jugamos. Nosotros nos clasificamos y estamos seguros de que podemos llegar muy alto. En concreto, podemos llegar hasta la tercera planta, la de los despachos, de la ESI.

¡HALA CHICHARRITOS!