Reseña: Hulk #12

Título en España: Hulk #12 Planeta Hulk #4: Armagedón
Título en USA: Incredible Hulk vol.2 nº104 & Incredible Hulk vol.2 nº105 & The Incredible Hulk Destruction nº1 & The Incredible Hulk Destruction nº2 & The Incredible Hulk Destruction nº3 & The Incredible Hulk Destruction nº4
Formato: Tomo, tapa rústica, 144 páginas.
Precio: 9.25 €
Editorial: Panini Comics

Reseña:

Con este duodécimo número llegamos al final de la colección en el actual volumen editado en tomos del Coloso Esmeralda. En este tomo podemos leer la conclusión de una de las mejores sagas que ha tenido un personaje como Hulk en los últimos años y, curiosamente, a partir de este instante pasa a convertirse en el centro del siguiente macroevento marvelita detinado a realizar crossovers entre colecciones y renovar de nuevo un universo saturado de esta clase de eventos "finales" como Dinastía de M, Civil War... y todas sus conclusiones.

Como decía, llega el final de Planeta Hulk, un final que, como bien vaticina el título del tomo, "Armagedón", no es, ni mucho menos, un final feliz. La vida de Bruce Banner ha venido siendo una sucesión de catástrofes que ha tenido que ir afrontando, Hulk había llegado a un estatus en el cual era capaz de liderar un planeta entero y hace que prosperara después de salvarlo de un tirano dictador. Sin embargo, esto no podía durar y el regreso del Gigante Verde a la Tierra estaba anunciado por parte de Marvel casi antes de que los Illuminati lo exiliaran, por error, en Sakaar. Aún así, esto no ha sido óbice para que Greg Pak firme una etapa importante en los guiones de la serie regular de Hulk, y he de reconocer que, en lo referente a los doce números que ha durado todo este Planeta Hulk, he acabado muy encantado del resultado final. Además, Pak escribe una conclusión que tiene de todo, desde momentos emotivos hasta la desmesurada brutalidad y acción que caracterizan a Hulk desde su creación. El descubrimiento del verdadero plan de Tony Stark, Reed Richards y demás componentes del grupo secreto que se hacen llamar Illuminati es trágico y una buena motivación para que, más que nunca, Hulk quiera destruir.

Sin embargo, llegados a este punto en Panini se dieron cuenta de que el arco argumental que pone el punto y final a Planeta Hulk -Armagedón, que como ya he comentado antes da nombre a este tomo- sólo eran dos números USA y había que completar la última entrega de la colección de alguna forma. Así, de los seis números que componen este volumen, los cuatro últimos (ojo, más de la mitad del contenido) estan dedicados a "Hulk: Destrucción", una miniserie del año 2005 escrita por Peter David y dibujada por Jim Muñiz y James Raiz. Tan extraño resulta esta inclusión que viene separada por un artítulo introductorio de las otras 48 páginas del tomo y en él se busca justifiar el porqué de tan polémica decisión. En Panini, ellos mismos veían que había que dar una explicación al lector, y si ellos mismos creían que había que buscar una disculpa es porque la decisión a lo mejor no era demasiado acertada.

En realidad, esta "Hulk: Destrucción" no es, ni más ni menos, que una forma de volve a poner en el punto de mira a un villano clásico del Goliat Verde como es Abominación. David se encarga de revisar el pasado de Emil Blonsky y la razón por la cual se convirtió en el monstruo que es ahora. La forma que elige para ello es un recurso fácil y manido a lo largo de la historia del noveno arte, dos personajes de peso y reconocibles a simple vista por el lector (el General Ross y el Doctor Leonard Samson) intentan evaluar al uno de los villanos más temibles del Universo Marvel, que está retenido por el Ejército de los Estados Unidos en una base secreta de Washington DC, para comprobar si éste pudiera pasar a ser un agente secreto que cumpliera misiones del mando estadounidense. Como todos imaginaréis, esta entrevista se transforma en una serie de recuerdos y flashbacks de lo que ha sido la vida de Blonsky desde que éste se encontró por vez primera con Ross hasta sus últimos enfrentamientos con Hulk.

La verdad es que esta miniserie no me ha parecido nada del otro mundo. Las mejores partes son las peleas entre Abominación y Hulk, pero la aparición de cierto personaje que todos creían muerto enturbia un poco la historia. La sensación que deja este relato es más bien pobre, el contenido, para ser cuatro números USA, no es lo que se podría decir denso y yo esperaba muchísimo más de David.

Como dibujantes del tomo, repite Carlo Pagulayan en los dos últimos números de Planeta Hulk y lo hace al mismo nivel que sus anteriores trabajos. Realmente se ha descubierto como un fantástico dibujante que me gustaría volver a ver en alguna otra cabecera importante de Marvel después de su sensacional año junto con Greg Pak. Todo lo contrario del equipo de artistas que llevan a cabo la miniserie complementaria que se incluye en el tomo, muy noventeros los dibujos salvo esas páginas en las que intentan imitar el estilo de la década de los sesenta o setenta cuando se narraban en sólo dos páginas todo el origen de los poderes de algún personaje. Son dos estilos distintos reunidos en un mismo tomo y, para mí, hay un evidente descenso del nivel del primero a lo siguientes.

En definitiva, si queréis conocoer el final de Planeta Hulk, tendréis que haceros con este tomo. Aunque no creo que merezca la pena por tener una de las últimas miniseries de Peter David a cargo de uno de sus personajes fetiche. La nota final desciende en picado por esa misma razón (aunque es mucho más alta si hablamos de "Planeta Hulk" en general).

6/10

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