21 de agosto de 2008

Curiosas paradojas

Es normal que juegue con el doble sentido de las palabras, siempre buscando ese significado sucio, descontextualizar lo llaman algunos. Alguna vez niego varias veces en una misma frase para escaquearme de alguna obligación. Pensando en todo esto me llegué a interesar por las paradojas.

Las paradojas son aquellas frasecillas extrañas que a simple vista no tienen mucho que esconder, pero que analizadas un poco más despacio vemos que son una contradicción y no sabemos si es cierto o falso. Buscando por ahí he encontrado muchas cosas curiosas acerca de estas paradojas.


De todas ellas hay una que se me ha planteado muchas veces es la llamada "Paradoja de Teseo":
Según cuenta le leyenda, después de que Teseo venciera al Minotauro en el laberionto de la isla de Creta, su barco fue conservado en Atenas durante largos años. Para asegurarse de que dicho barco se mantuviera durante tanto tiempo, los griegos sustituían según iba siendo necesario las tablas que lo componían por otras nuevas. Algunos filósofos de la época se preguntaban si el barco era el mismo que utilizó Teseo o era otro distinto.
A simple vista parece una tontería más, pero creo que analizado un poco más detenidamente, creo que en cierto modo, los filósofos tenían razón al dudar. A pesar de que la madera pudiera (o pudiese) ser del mismo tipo de árbo o las partes del barco se reconstruyeran (o reconstruyesen) usando las mismas técnicas que las utilizadas para el barco original... Llegaría un momento en el cual, hasta la última pieza hubiera sido sustituida, por lo que ninguna de las partes del barco habría hecho el viaje desde la isla de Creta, por lo que en realidad, ése no era verdaderamente el barco que usó Teseo.

Creo que aquí se refleja algo que durante siglos ha caracterizado a los humanos: el intento de recordar ciertos hechos relevantes para uno mismo, consiguiendo de una forma u otra que éstos se mantengan en el tiempo a pesar de la obviedad de que si dicho recuerdo se basa en un objeto que debe ser restaurado cada cierto tiempo, inevitablemente este objeto cambiará y no será igual que originalmente.

Así que me inclino a pensar, ¿a la hora de conservar a la fuerza ciertas ideas o recuerdos no hemos cambiado demasiado la historia hasta que esta no se haya adaptado a ese recuerdo? Paradojas.

Por cierto, que mañana me voy de camping, dejo el bot preparado para que os suministre del mensaje vuestro de cada día. Un saludo

2 comentarios:

Anónimo dijo...

que filosofico tas levantao esta mañana oye...

Miguel Negrillo dijo...

Y si dos daneses se encuentrna un barco croate con las llaves puestas, pues que se lo lleven. Dentro de mil años no quedará de él más que el recuerdo...

...y una medalla de oro robada.

Related Posts with Thumbnails