Se termina el tiempo y el gobierno chino no ha cumplido su promesa de promover los derechos humanos como parte del legado de las Olimpiadas. “Si las autoridades chinas no adoptan medidas urgentes para poner fin a las violaciones de derechos humanos a lo largo del próximo año, corren el peligro de empañar la imagen de China y el legado de las Olimpiadas de Pekín” afirmó Irene Khan, secretaria general de la ONG Amnistia Internacional.
En la última evaluación que ha hecho esta organización de los progresos de China en relación con las mejoras prometidas en materia de derechos humanos, AI afirma que varios activistas con base en Pekín siguen sometidos a detención domiciliaria y a fuertes medidas de vigilancia policial, y que activistas de otras partes de China se enfrentan a patrones reforzados de abuso mientras la atención se centra en los preparativos de las Olimpiadas en Pekín. El informe de Amnistía Internacional pone de relieve la continuidad de una campaña represiva contra periodistas que y el uso continuado de la detención sin juicio como parte de las operaciones “de limpieza” de Pekín con vistas a los Juegos Olímpicos de 2008.
AI pide a las autoridades la abolición de la pena de muerte, pide acceso especial a los informes sobre condenas de muerte de abogados y familiares, y publicando estadísticas nacionales completas sobre sentencias de muerte y ejecuciones. “La aplicación de la pena de muerte en China, que es el máximo ejecutor mundial, sigue rodeada de secreto” asegura Irene Khan.
En su última evaluación, la organización que defiende los derechos humanos llegaba a las siguientes conclusiones:
- Pena de muerte: Continuaban dictándose condenas a muerte y realizándose ejecuciones por delitos no violentos, y seguían sin hacerse públicas las estadísticas nacionales sobre pena de muerte, si bien las autoridades afirmaron que la aplicación de la pena de muerte había descendido un 10 por ciento a partir del restablecimiento de la función revisora del Tribunal Supremo Popular el 1 de enero de 2007. Había pruebas de que los compromisos oficiales de introducir mayor transparencia en todos los niveles judiciales podían no estar siendo cumplidos, y seguía negándose a familiares y abogados el acceso a las personas condenadas a muerte, así como información sobre su situación. Existía la confirmación oficial reciente de que a menudo la pena de muerte se imponía arbitrariamente, y de que los tribunales aplicaban criterios diferentes en una u otra zona del país.
- Reclusión sin juicio: Había aumentado el uso de la detención sin juicio para “limpiar” Pekín con vistas a los juegos olímpicos, incluida la “Rehabilitación Forzosa de Drogadictos” y la ampliación de categorías de delitos menores a los que se aplica la “reeducación por el trabajo”.
- Activistas de derechos humanos: Se habían intensificado los abusos contra activistas de derechos humanos en otras partes de China, incluida la muerte de Chen Xiaoming, activista del derecho a la vivienda galardonado con un premio, ocurrida en Shanghai el 1 de julio, poco después de salir de prisión en libertad condicional por razones de salud; según informes, había sido torturado bajo custodia. Existía persecución de abogados y asesores letrados que trabajaban en favor de víctimas de violaciones de derechos humanos, incluido el caso de la presunta paliza recibida por el invidente Chen Guangcheng, asesor legal encarcelado, que le propinaron compañeros reclusos el 16 de junio siguiendo las órdenes de los guardias penitenciarios. A Chen lo encarcelaron en la provincia de Shandong al intentar exigir responsabilidades a las autoridades locales por presuntas prácticas de obligar a mujeres a someterse a operaciones forzosas de aborto y esterilización para cumplir las cuotas de nacimientos; Existía persecución de activistas que intentaban llamar la atención sobre los desalojos de personas como consecuencia de los proyectos de construcción relacionados con las Olimpiadas; un caso es el de Ye Guozhu, encarcelado, a quien los informes indican que aplicaron descargas eléctricas con porras a finales del año pasado.
- Libertad de prensa: Continuaba la campaña represiva contra el periodismo nacional: encarcelamiento de periodistas y escritores, despido forzoso de personal empleado en medios de comunicación y clausura de publicaciones. Persistía la censura sobre Internet, que supuso el cierre de sitios web y varios intentos recientes de silenciar las protestas en una ciudad, Xiamen, mediante nuevas disposiciones legales para obligar a los usuarios de Internet a registrarse con su nombre auténtico.
Las autoridades chinas deben impulsar el cumplimiento de sus promesas de mejorar los derechos humanos para que, cuando llegue agosto de 2008, la población pueda sentirse orgullosa en todos los aspectos de lo que su país puede ofrecer al mundo.
Antes de que me llameis racista, fascista y cosas de esas por criticar a un pais de Asia y comunista (aunque de comunista le queda poco más que el nombre), que conste que el único motivo de mi queja es la violación de los derechos humanos.
1 comentario:
no tendrían que celebrarse en china los juegos olímpicos. hombre, pues vaya un país que han elegido que violan los derechos humanos y son unos torturadores. hombre!
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