Reseña: Bleach #9

Título en España: Bleach #9: Fourteen days for conspirancy
Título en Japón: Bleach volume 9: Fourteen days for conspirancy
Formato: Manga, blanco y negro, sentido de lectura oriental, 192 páginas
Precio: 7.50€
Editorial: Glénat

Reseña:

Kurosaki, Inoue, Sado e Ishida son guiados por Yoruichi hasta la Sociedad de Almas. Después del entrenamiento al que se ha sometido cada uno de los cuatro por fin llega el momento de enfrentarse a enemigos más poderosos.

En este volumen comenzamos a ver la evolución de los personajes: el entrenamiento al que se ha sometido Ichigo le ha servido, no sólo para poder volver a ser shingami, sino también para lograr la confianza en sí mismo y el control sobre su poder que necesitaba para poder vencer a rivales mucho más experimentados y curtidos que él en la batalla. El primer combate es contra el guardián de la Puerta Oeste, Jidanbô, al que tendrán que vencer para acceder a Seireitei (la ciudad de los shinigami, donde se encuentra retenida Rukia esperando su ejecuión).

El título de este manga no podría ser menos apropiado: como ya pudimos entrever en números anteriores, la condena a Rukia es injusta y parece que hay algo más detrás de todo. Es algo por lo que se caracteriza Tite Kubo, (a parte de ese humor que es absurdo y exagerado pero que ya es común en las situaciones críticas que viven los protagonistas, sobre todo con Kurosaki e Ishida) desde que comenzó la historia de Bleach, deja varias incógnitas abiertas que no soluciona hasta varios números después, una forma de mantener la trama unida para poder volver sobre las línea que se ha trazado anteriormente. Quizá sea eso lo que crea la sensación de que no avanza demasiado rápido o que no se diferencien bien las sagas unas de otras.

En general, el mejor tomo de Bleach que se ha publicado hasta ahora, por fin comienza una saga larga y esperemos que continúe tan bien como ha comenzado.

9/10

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