Empecemos por el 23.
Sandro (1995-1996)
El tinerfeño que salió de la cantera blanca formó parte, de forma oficial, del primer equipo en dos campañas. El centrocampista lució el 23 en su segunda temporada en el club, pero apenas contó para ninguno de los técnicos que se sentaron en el banquillo blanco.

Guti (1996-1997)
Uno de los jugadores con más clase que jamás han jugado en el Santiago Bernabéu, que se ha hecho célebre usando el dorsal número 14, comenzó su andadura en el primer equipo con el número 23 a la espalda.

Dani (1997-1998)
El canterano barcelonés volvió al Madrid después de dos años en el Real Zaragoza, y se hizo con el dorsal que dejó libre Guti cuando tomó el 14. Dani parecía que por fin tendría su justificada oportunidad, pero no fue así.

Samuel Eto'o (1998-1999)
El camerunés recibió el 23 como dorsal del primer equipo después de ser ascendido del Real Madrid B. Sin embargo, nunca contó para el entrenador Guus Hiddink, y ello hizo que apenas durara unos meses antes de abandonar la disciplina blanca.

Perica Ognjenovic (1999)
Fichado por Lorenzo Sanz, llegó en enero de 1999 al Real Madrid, el Átomo lució el 23 como primer dorsal en el Madrid. Ni Hiddink, ni Toshack contaron con él en absoluto, y se pasó casi en blanco sus primeros meses.

Julio César Santos (1999-2000)
El defensa central brasileño destacó en sus actuaciones con el Real Valladolid, lo que le valieron su fichaje por el Madrid. El zaguero prometía mucho, pero como muchos otros antes que él no llegó jamás a consagrarse en el once madridista.

Pedro Munitis (2001-2002)
En su último año en el Madrid, Pedro Munitis cambió el número 17 que llevó hasta entonces por el 23. Sin embargo, en su última campaña en el club blanco no llegó a disputar nada más que 6 partidos oficiales de Liga, con lo que no será recordado por la afición blanca.

David Beckham (2003-2007)
El último verdadero "galáctico" que fichó Florentino Pérez en su primera etapa como presidente blanco, el inglés David Beckham, no pudo vestir el 7 que llevaba en el Manchester United, con lo que tomó el 23, un dorsal poco habitual que le sirvió para vender camisetas y hacer publicidad hasta tal punto de hacerlo propio en los siguientes equipos en los que ha jugado, como en Estados Unidos, en Los Angeles Galaxy.

Wesley Sneijder (2007-2008)
En su primer año en el Real Madrid, el centrocampista neerlandés procedente del Ajax se hizo con el 23 que dejó libre David Beckham, y completó una de sus mejores campañas con el primer equipo. Aunque ya dejó algunas pistas sobre la irregularidad que le caracterizaría en los siguientes años de blanco.

Rafael Van der Vaart (2008-2010)
El único fichaje destacado que realizaron el dúo Mijatovic-Calderón en el verano de 2008 fue el del también neerlandés Rafael Van der Vaart, un jugador que destacó por su técnica y goles en la Bundesliga pero que nunca llegó a asentarse en el once inicial del Madrid.

Mesut Özil (2010-?)
El alemán fue uno de los jugadores que más destacó en el Mundial de Sudáfrica 2010. Özil es un auténtico jugón cuya posición en el campo es la media punta.

Ahora pasemos al dorsal 24, un número que han vestido algunos jugadores que sí han conseguido convertirse en titulares en el Madrid:
Álvaro Benito (1995-1997)
En las dos primera temporadas en las que los dorsales eran fijos para los componentes de las plantillas de los equipos de la Liga, el canterano zurdo Álvaro jugó con el número 24. En la 95/96 no fue un jugador que destacase demasiado en el equipo, aunque con la llegada de Capello, algunos de los canteranos como él mismo, Víctor Sánchez o Guti, cobraron mayor protagonismo, con lo que se dio a conocer.

Aitor Karanka (1997-1998)
El defensa central vasco fichó por el Real Madrid para suplir la baja de Rafael Alkorta, el jugador que formaba pareja con Fernando Hierro en la zaga merengue. A su llegada al primer equipo, Karanka tuvo algunos problemas de adaptación y ataques de ansiedad, con lo que no pudo jugar regularmente.

Álvaro Benito (1998-2000)
Álvaro, ya lesionado, regresó de su fallida cesión al Tenerife, y se pasó dos temporadas en blanco en un infinito plazo de recuperación impuesto por los fisios y médicos del club. El Madrid le dio ficha del primer equipo en esos dos años, con lo que obtuvo de nuevo el número 24 con el que debutaría como profesional.

Claude Makélélé (2000-2003)
Cuatro fueron los años que duró el medio centro defensivo francés en el Real Madrid. Procedente del Celta, Makélélé era el jugador encargado de guardar la espalda a un equipo que, poco a poco, se fue llenando de los llamados "galácticos".

En el verano de 2003, Makélélé exigió una renovación que no llegó, y una oferta del Chelsea al Real Madrid hizo que se declarara en rebeldía para favorecer su salida al club londinés. La ausencia de un destructor de juego en el centro del campo ha sido algo que el Madrid ha echado de menos durante varios años.
Álvaro Mejía (2004-2007)
El defensa canterano subió al primer equipo y vistió el número 24 que un año antes no perteneció a ningún jugador de la primera plantilla. Mejía ocupó el rol de suplente en la defensa del equipo, algunas veces ni siquiera entrando en las convocatorias.

Javier Balboa (2007-2008)
Balboa jugó cedido en el Racing de Santander una temporada antes, y volvió al primer equipo para formar parte de una plantilla de 25 hombres. Sin embargo, el canterano de origen ecuatoguineano, nunca demostró nada, más allá de una pelea en el entrenamiento contra el central Pepe.

Javi García (2008-2009)
Uno de los medio centros que más proyección parecían tener en la cantera blanca, un jugador protegido por el mismísimo Vicente Del Bosque, pero al que le vino el Madrid demasiado grande en el momento de jugar de titular.

Esteban Granero (2009-2010)
Centrocampista también de la cantera blanca que, como muchos otros, tuvo que buscar una salida en otro club para demostrarle a los técnicos madridistas su valía para ser parte del primer equipo. Granero jugó dos años en el Getafe y se ganó la recompra del Madrid en el verano de 2009.

Sami Khedira (2010-?)
El centrocampista alemán fue una de las peticiones de José Mourinho a su llegada al club blanco. Una buena actuación en el Mundial favorecieron que Khedira pudiera dar el salto a un grande. Medio centro de gran envergadura es el compañero en la medular de Xabi Alonso.

3 comentarios:
Hola, buenos días, ¿no sabes que "hablar" va con hache y "anoche" se escribe junto? ¿Tampoco sabes meter tildes y mayúsculas?
Esas peticiones llenas de faltas, o al Tuenti, o al Mundo Vomitivo, gracias.
Te juro que me cuesta entender cuando escribes.
No, yo en mi blog hablo de lo que me sale de las pelotas, ¿cómo lo ves?
Tu escritura da cáncer
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