¡Maldita suerte alemana!

Ayer tuve la impresión de que estaba viendo un partido que ya había pasado muchas más veces anteriormente. Por enésima vez un equipo español se cruzaba en Europa con uno de los cocos históricos de los equipos nacionales... y otra vez el Bayern de Munich tuvo la suerte necesaria como para meter el gol necesario justo en el último minuto. ¡Y lo hizo dos veces! Al final del tiempo reglamentario y al final de la segunda parte de la prórroga.

Todos llevan razón, el Getafe es un club pequeño pero con un equipo muy grande.

El Getafe consiguió ayer que prácticamente todos nos hiciéramos azulones. Es admirable la capacidad del equipo del sur de Madrid de afrontar la vuelta de una eliminatoria, en casa, con 10 jugadores y contra el todopoderoso Bayern. Decía Beckembauer que no sabía ni dónde estaba Getafe, ni siquiera sabía que Michael Laudrup era su entrenador, pues espero que después de los 120 minutos que se pasó su equipo sufriendo (normal, a ver a quién se le ocurre acudir al Coliseum Alfonso Pérez vistiendo de blanco) y en los que estuvo la gran mayoría del tiempo eliminado.

Menudo golazo de Cosmin Contra, al que recordaréis que ya jugó aquella mítica final contra el Liverpool cuando militaba en el Alavés (5-4 que quedó el resultado) y luego se fue al Milán, Atlético de Madrid, y volvió a un equipo modesto para triunfar. Pero este rumano avergonzó a toda la zaga alemana después de una arrancada de ensueño, un regate detrás de otro y batir a ese hombre que ya no valdría ni para portero de discoteca, ese hombre que parece apartarse de los balones cuando le disparan a portería, ese hombre que cometió una evidente falta en el último minuto del partido, que el árbitro permitió miserablemente y que acabó con el empate a 3 que lució en el marcador, desgraciadamente, al final del partido. Ese hombre que se llama Oliver Kahn.

Y hablando de golazos, el que marcó Casquero al inicio de la prórroga ya podrían enmarcarlo también en el despacho de Ángel Torres como uno de los momentos más importantes de la historia del Geta. Lástima que el árbitro robara cuando más le convenía al Bayern: expulsión rigurosa de Rubén de la Red, pasó por alto multitud de faltas del Lell ese que tendría que haber sido expulsado por doble amarilla, la falta del viejuno Kahn...


El Getafe estuvo a punto de hacer historia en la Copa de la UEFA y, a pesar de que no van a jugar la semifinales, han conseguido que "España entera sea getafera". A día de hoy no me gustaría estar en la piel de los valencianistas en la final de la Copa del Rey, van a jugar contra el equipo más querido del país y en su banquillo tienen al técnico más odidado. Yo no tengo duda de a quién voy a animar, por supuesto.

En fin, ¡vivan Celestini, Casquero, Cortés, Gavilán y Laudrup! ¡Y viva el Geta!