Título en USA: Incredible Hulks nº622-625
Formato: Comic-book, grapa, color, 2 números, 48 páginas cada número.
Precio: 3'50 € cada número.
Editorial: Panini
Reseña:
Dentro de la serie regular de Los Increíbles Hulks, nos encontramos con un pequeño arco argumental en el que Greg Pak recupera a Los Guerreros aliados de Hulk para intentar cerrar, en cierto sentido, una historia que lleva abierta desde el final de World War Hulk.
Ya hace años, Greg Pak nos avisó de que Planeta Hulk, aquella saga que pudimos leer íntegramente en la serie Incredible Hulk, y que servía para mantener ocupado al Gigante Verde mientras en la Tierra se producía una guerra civil entre héroes, no era más que la primera parte de una trilogía. De aquellas declaraciones, pocos en Marvel se acuerdan, y muchos creo que ni siquiera pretenen hacerlo, sobre todo desde que el personaje cayó en manos de Jeph Loeb. Así pues, debo intuir que Planeta Hulk vio su continuación en World War Hulk, y la tercera parte, a modo de conclusión de todo aquello es este arco argumental de cuatro capítulos (que en España no son más que dos números dobles) titulado Planeta Salvaje.
En primer lugar, tengamos en cuenta que Planeta Salvaje ocurre inmediatamente después de los acontecimientos de La Guerra del Caos, y las consecuencias se esta son más que evidentes desde el principio. Sin ir más lejos, Bomba A está convaleciente, y es incapaz de luchar, y la historia comienza con Hulk subiendo al mismísimo Olimpo para enfrentarse a Zeus (algo que, realmente, no es más que la semilla para lo que pasará en el siguiente arco argumental de la serie). En un giro de guion más bien poco preparado y no muy creíble, Hulk pasa de ser derrotado y debilitado por Zeus, a viajar junto con Los Guerreros a Tierra Salvaje para salvar a los pocos supervivientes de Sakaar que ahora viven allí. ¿Os suena coherente? No, a mí tampoco.
Creo que Greg Pak tuvo su momento de gloria a los mandos de las historias del Goliat Esmeralda con todo aquello de Planeta Hulk, y que lo que ha intentado plantear posteriormente no ha sido más que una decepción detrás de otra. Si algo tiene bueno este guionista es que tiene claro que cualquiera que sea el nombre de la cabecera de Hulk, esta debe tener un buen número de personajes luchando entre sí. Acción, acción y más acción, eso es lo que espera el lector y el aficionado cuando se trata del Increíble Hulk, y eso es precisamente lo que nos ofrece Pak. Pero no busquéis un guion profundo, ni diálogos bien construidos, ni siquiera una historia épica como la que ya vimos antaño. Veremos a Korg, Skaar y compañía luchando contra dinosaurios, insectos gigantes y demás, pero la historia de transfondo es muy predecible.
A los lápices se encuentra Dale Eaglesham, un autor muy completo que también se hace cargo de las portadas de ambos números en su edición española. Este dibujante es uno de los tantos que puedo decir que ofrecen una de cal y otra de arena. Por ejemplo, en estos cómics tiene la oportunida de lucirse al cien por cien por toda la acción con la que debe impregnar las páginas pero, supongo que condicionado por un guion tan flojo, a veces parece que los personajes salen de la nada, y confunde al lector en cuanto a posiciones y distancias.
En definitiva, Planeta Salvaje está a la altura del bajísimo nivel que muestra Los Increíbles Hulks desde que el foco de atención marvelita dejó de enfocarla (cuando pasó toda la promoción de la última película sobre Hulk).
3/10
Precio: 3'50 € cada número.
Editorial: Panini
Reseña:
Dentro de la serie regular de Los Increíbles Hulks, nos encontramos con un pequeño arco argumental en el que Greg Pak recupera a Los Guerreros aliados de Hulk para intentar cerrar, en cierto sentido, una historia que lleva abierta desde el final de World War Hulk.
Ya hace años, Greg Pak nos avisó de que Planeta Hulk, aquella saga que pudimos leer íntegramente en la serie Incredible Hulk, y que servía para mantener ocupado al Gigante Verde mientras en la Tierra se producía una guerra civil entre héroes, no era más que la primera parte de una trilogía. De aquellas declaraciones, pocos en Marvel se acuerdan, y muchos creo que ni siquiera pretenen hacerlo, sobre todo desde que el personaje cayó en manos de Jeph Loeb. Así pues, debo intuir que Planeta Hulk vio su continuación en World War Hulk, y la tercera parte, a modo de conclusión de todo aquello es este arco argumental de cuatro capítulos (que en España no son más que dos números dobles) titulado Planeta Salvaje.
En primer lugar, tengamos en cuenta que Planeta Salvaje ocurre inmediatamente después de los acontecimientos de La Guerra del Caos, y las consecuencias se esta son más que evidentes desde el principio. Sin ir más lejos, Bomba A está convaleciente, y es incapaz de luchar, y la historia comienza con Hulk subiendo al mismísimo Olimpo para enfrentarse a Zeus (algo que, realmente, no es más que la semilla para lo que pasará en el siguiente arco argumental de la serie). En un giro de guion más bien poco preparado y no muy creíble, Hulk pasa de ser derrotado y debilitado por Zeus, a viajar junto con Los Guerreros a Tierra Salvaje para salvar a los pocos supervivientes de Sakaar que ahora viven allí. ¿Os suena coherente? No, a mí tampoco.
Creo que Greg Pak tuvo su momento de gloria a los mandos de las historias del Goliat Esmeralda con todo aquello de Planeta Hulk, y que lo que ha intentado plantear posteriormente no ha sido más que una decepción detrás de otra. Si algo tiene bueno este guionista es que tiene claro que cualquiera que sea el nombre de la cabecera de Hulk, esta debe tener un buen número de personajes luchando entre sí. Acción, acción y más acción, eso es lo que espera el lector y el aficionado cuando se trata del Increíble Hulk, y eso es precisamente lo que nos ofrece Pak. Pero no busquéis un guion profundo, ni diálogos bien construidos, ni siquiera una historia épica como la que ya vimos antaño. Veremos a Korg, Skaar y compañía luchando contra dinosaurios, insectos gigantes y demás, pero la historia de transfondo es muy predecible.
A los lápices se encuentra Dale Eaglesham, un autor muy completo que también se hace cargo de las portadas de ambos números en su edición española. Este dibujante es uno de los tantos que puedo decir que ofrecen una de cal y otra de arena. Por ejemplo, en estos cómics tiene la oportunida de lucirse al cien por cien por toda la acción con la que debe impregnar las páginas pero, supongo que condicionado por un guion tan flojo, a veces parece que los personajes salen de la nada, y confunde al lector en cuanto a posiciones y distancias.
En definitiva, Planeta Salvaje está a la altura del bajísimo nivel que muestra Los Increíbles Hulks desde que el foco de atención marvelita dejó de enfocarla (cuando pasó toda la promoción de la última película sobre Hulk).
3/10
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